viernes, 12 de octubre de 2012

NOTA RECTORADO



Estimados Directores: les enviamos en archivo adjunto una declaración vinculada a la toma del Instituto la cual le solicitamos difundir.

Por otra parte les informamos que el lunes próximo elevaremos a la Dirección de Formación Docente un documento con nuestros requerimientos y anexado el petitorio elaborado por ustedes y los Coordinadores.

Muchas gracias

Francisco Velasco

A LA COMUNIDAD EDUCATIVA
A 10 DÍAS DE LA TOMA DE NUESTRA INSTITUCIÓN
Desde el Rectorado queremos manifestar nuestra profunda preocupación por la continuidad de la medida de fuerza que afecta el normal funcionamiento del Instituto. Todos estamos de acuerdo con los objetivos perseguidos, no así con la metodología implementada a partir de la toma como hemos declarado en más de una oportunidad. Durante todos estos días hemos conversado con docentes, alumnos y administrativos en las inmediaciones de edificio; recibimos correos electrónicos, llamados telefónicos y mensajes de textos que expresaban situaciones generales y particulares que se han provocado a raíz de este delicado contexto. Tal vez quienes están a favor de la toma no tienen la dimensión de los múltiples perjuicios ocasionados.  Para comenzar la forma irregular del dictado de clases. Algunos docentes utilizan las instalaciones del edificio, otros dan clases públicas, otros en bares y otros no dan clases. Los que utilizan el edificio no pueden contar con los materiales de uso habitual como cañones, mapas, etc. Tampoco pueden utilizarse los distintos laboratorios y la biblioteca. Aquellos que dan clases en los bares pueden hacerlo siempre y cuando las comisiones sean reducidas, además de estar dispuestos o contar con la posibilidad de solventar un mínimo gasto que la situación generalmente implica. Pero además octubre no es un mes cualquiera. Parciales, recuperatorios, entregas de trabajo son habituales y necesarios en esta época del año. El hecho de utilizar las instalaciones del edificio puede generar alguna cuestión que ya se ha vivido en épocas normales. A manera de ejemplo si algún ascensor se quedara trabado con personas en su interior nos preguntamos quiénes se hacen responsables de la situación. Contamos con personal entrenado ante una circunstancia como esa, con las herramientas correspondientes y aquellos otros responsables de comunicarse inmediatamente con la empresa que se ocupa de los elevadores ante una eventual emergencia. Hoy no es posible actuar como la circunstancia ameritaría.
En esta época todavía se están definiendo varias selecciones docentes para cubrir cátedras vacantes, ya sea en la instancia de evaluación del  jurado o bien a partir de los coloquios o clases públicas correspondientes. Todo se haya frenado con el consiguiente perjuicio hacia los alumnos.
No es posible entregar los títulos que demandan los egresados o se retrasan la emisión de los mismos, ni tampoco certificados de materias aprobadas o simplemente una constancia de examen para presentar en un trabajo por parte de los alumnos. Los docentes que han tenido problemas de salud no pueden hacer el trámite correspondiente para solicitar médico a domicilio.
El lunes 15 de octubre deberían comenzar las inscripciones para el ciclo lectivo 2013, situación que no va ser posible. 
También ese mismo lunes vence el plazo para la presentación de las listas de los candidatos a integrar el Consejo Directivo y el Rectorado como parte de las elecciones generales que deben realizarse. Tampoco va a ser posible. 
El 17, 18 y 19 de octubre deberían realizarse unas Jornadas Nacionales de Historia que ya se encuentra organizadas con la concurrencia de docentes y alumnos de distintas partes del país.
El sábado 20 de octubre comienza el ciclo de las funciones del grupo del teatro de la institución abiertas a todo el público.
Por citar las actividades inmediatas que se suceden en el Instituto.
Por ello nos preguntamos: ¿hasta cuándo?, ¿hasta cuándo continuar con una medida de fuerza que no desvela a los ministros de educación de turno pero que sí ocasiona un sinnúmero de perjuicios a nuestra propia comunidad educativa? Comunidad que está encolumnada en perseguir los mismos objetivos ¿No será tiempo de cambiar de estrategias? ¿Es conveniente prolongar una situación intransigente que hasta ahora no ha hecho otra cosa que dividir las aguas, generar incertidumbres, angustias y enojos? Se ha dado una situación paradójica al estar unidos por la defensa de nuestra institución y de la educación pública y divididos por una toma que ya juzgamos agotada.
Si se trata de posicionarnos para lograr resultados, busquemos otras opciones. Pero también una forma de decir “presente”, “aquí estamos” es con una institución funcionando a pleno, con sus instalaciones, con sus cátedras cubiertas, con una matrícula que desborde, con aulas repletas. Si se trata de defender nuestro Reglamento Orgánico y la autonomía que nos confiere como proclamamos, permítannos continuar eligiendo a nuestros docentes y a nuestras autoridades. Mostremos nuestra institución funcionando como corresponde a aquellas personas que nos visitan  con motivo de las próximas actividades académicas y culturales. 
Por eso apelamos a la capacidad reflexiva de todos aquellos que estén a favor de sostener la toma de la institución, para que revean la postura, que no significa claudicar por una lucha que consideramos justa y necesaria sino cambiar estrategias, buscar alternativas, unir más voluntades y que ningún integrante de nuestra Comunidad Educativa se vea perjudicado.

El Rectorado

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